Al parecer el discurso político de la coalición dominante intenta explicar la realidad del país a través del mythos, ¿Por qué decimos que a través del mythos? Pues bien, Mircea Eliade en primera instancia define al Mito, como “cultos profetices y milenarios que proclaman la inminencia de una era fabulosa de abundancia y de beatitud”[1]. Por ejemplo en el caso de México, FCH[2] anuncia que “ya estamos en la senda de la recuperación”; que “se han creado más de medio millón de nuevos empleos registrados en el seguro social”; que existe un incremento de treinta y seis por ciento en las exportaciones, “el mayor crecimiento en veinte años”; menciona que “la inversión extranjera también ha crecido […] y que ha sido de casi setenta mil millones de dólares”; anuncia un apoyo a las PYMES “cuatro veces más que en cualquier otro gobierno”; y que “se ha apoyado con capacitación y financiamiento a más de cuatrocientos mil PYMES” (Calderón Hinojosa, 2010).
En tema de seguridad manda spots televisivos donde argumenta que:
· Las fuerzas armadas apoyan a los gobiernos municipales y estatales en la lucha contra el crimen.
· Existe un intento por contar con policías “mas” honestos, por lo cual se ha recrudecido las condiciones para ingresar a las filas de las dependencias de seguridad.
· Se está actualizando la ley para acabar con la impunidad.
· Se está trabajando en políticas activas de prevención del delito.
Es decir el discurso del gobierno federal en lo que respecta a seguridad se sustenta en señalar que está logrando el desmantelamiento de las estructuras criminales (Presidencia de la República, 2010).
Sin embargo Ciro Murayama, profesor de la Facultad de Economía, piensa que los signos de reactivación son solo de carácter coyuntural, pero que los problemas estructurales persisten, ya que la recuperación puede verse dificultada y con algunos obstáculos, debido a que el escenario de crecimiento económico internacional tiene expectativas pesimistas (Murayama, 2010). El Universal publicó una serie de indicadores de la CONEVAL y la CONAPO, lo cuales hacen difícil pensar que “ya estamos en la senda de la recuperación”, estos indicadores señalan que actualmente existen cuatro millones novecientos mil jóvenes pobres en todo el país, y por parte de la CONAPO existe un estudio donde muestra que uno de cada cinco jóvenes tiene problemas para cubrir las necesidades básicas de salud y educación (Alcántara, 2010). Estos fenómenos evidentemente tienen incidencia en la distribución de la riqueza, es importante hacer hincapié en que si estos jóvenes tienen problemas de desigualdad hoy, lo más probable es que reproducirán estas condiciones en el futuro, ya que existe un fenómeno de histéresis, es decir, dado que la distribución de la riqueza afecta las condiciones sociales de reproducción y las principales variables macroeconómicas como el consumo de las familias, el ahorro y el nivel de inversión para este periodo, lo más seguro es que también lo hará en el periodo siguiente, tal y como acertadamente apunta Stiglitz (Stiglitz; Hoff, 2002).
En lo que respecta al tema de seguridad, La Jornada publicó un artículo en donde el titular del CISEN, Guillermo Valdés, informaba que la lucha anticrimen ya había cobrado la vida de veinticuatro mil ochocientos veintiséis personas al 16 de Julio y en lo que va del sexenio ya son “poco más de veintiocho mil asesinatos” (La Jornada, 2010). Nos parece evidente que el panorama de crisis económica y el ambiente de violencia contribuyen a la metástasis de la esquizofrenia social.
Creemos que el discurso y en ese sentido la fórmula política se está apartando del contexto social y empieza a valerse de utopías morales, decimos esto porque al final muchos suponen que la lucha al crimen organizado se ganará de manera indefectible, como si la historia siguiera el fulgúreo camino de algo o alguien superior y este asegurara que siempre triunfarán los buenos y se castigara al malo, sin embargo, este discurso obedece a una explicación de la realidad a través de la Teología, por eso decimos que la coalición dominante retorna al mythos.
¿Cuál es la causa por la que la clase gobernante se vale del mito?
Partamos de la hipótesis de que el Estado se encuentra en una crisis hegemónica, ya que los bastiones de la sociedad política, es decir, el poder de estado, el aparato represor de estado y el aparato ideológico de estado, están tambaleantes, esto lo puede probar el contexto social en el estamos ahora (Buci-Glucksmann, 1978).
Sin embargo la coalición dominante no solo tiene un problema con su fórmula política, sino que al existir una falta de consenso, ha emprendido una campaña para reforzar su aparato represor; resumiremos en dos puntos básicos:
· La coalición dominante se vale del mythos y de utopías morales para reforzar su fórmula política, y lo hace a través del aparato ideológico de la información (prensa, radio, TV), esta es la razón por la cual lo ha puesto en una posición dominante[3].
· Hay un rearmamento del cuerpo punitivo y de coerción: la salida del ejército a las calles, para reforzar su aparato represor, sin embargo creemos que la acción gubernamental concede una posición primicia al aparato represor con respecto al aparato ideológico.
Es necesario encontrar espacios de resistencia, en donde las voces de los que no somos parte de la coalición dominante también sean escuchadas, si la sociedad es una construcción social, es decir la creamos día con día, también es posible que la debilitemos día con día. No buscamos el poder, muchos han asegurado que hay que obtener el poder para poder cambiar "el mundo". Pero nosotros que el camino para buscar el poder es largo y traicionero, tus ideales cambian y también tus objetivos. Buscar el poder sería permancer en la misma dinámica, sería reproducir el sistema; la propuesta puntual pues, es esta, informate, no creas los mythos, no creas sus mentiras, no reproduzcas su ideología, ayuda a crear y a esparcir la conciencia. Oponte a sus deseos, has que tu paso por el mundo sea visible y no seas una maquina-humano.
"El capitalismo existe hoy porque lo creamos hoy" - John Holloway -
[1] Eliade Mircea, Mito y realidad, Ed. Labor S.A; España 1991, pág. 4.
[2] Nos referiremos a Felipe Calderón Hinojosa como FCH.
[3] FCH anunció la transición de la televisión analógica a la televisión digital, con lo cual asegurará poner a los medios, como el aparato ideológico dominante, es criticable en el sentido de que se destinarán 18 mil millones de pesos, para equipar a la población con televisiones aptas para recibir esta señal, mientras que la población tiene otras necesidades más apremiantes (Garduño, 2010).